miércoles, noviembre 26, 2008

Misma especie

Para el Gambito.

Hubo, quizás, un invierno originario
que te metió el frío en los huesos
y te lanzó al mundo para buscar
sin saber el objeto de la pesquisa
ni las probabilidades de éxito.

Como viejo marino reposas,
desorientado, sobre una roca
a meditar acerca de los vaivenes
y las desgracias.

La curvatura del océano aún no se precisa
y cada ola le da forma a la historia.
No tienes más mentalidad que el agua enorme
que te lleva de un puerto al otro
cruzando vidas y argumentos
como propiedades privadas apenas pisadas
por un ladrón o un turista.

Pertenecemos, te decía, a la misma especie.

7 comentarios:

  1. Esa especie, me pregunto, ¿tiene agallas? ¿O tan solo ojos de cristal?

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  2. Una ves me entro un catarron a causa de un invierno frio...

    No hay nada peor que tener agallas.
    Saludos.

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  3. Las ganas necesarias para descubrir la vida. Abrazos.

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  4. En la especie humana haya ejemplares que están más allá del bien y del mal. Hay otros (pocos) que superan a la especie, ya no son lo que parecen ser: están más allá de la humanidad.

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  5. Anónimo2:38 a.m.

    Me a gustado mucho perderme por su blog, me a sido muy grato he instructivo, es muy completo, muchas gracias.
    Saludos

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  6. Aquí, el gris del cielo se toca los dedos con el río. Tu poema es el soundtrack de este diciembre triste y lejano. No calles nunca.

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